Lleida ha dejado de ser una ciudad con potencial a ser una ciudad con liderazgo”, afirmó su alcalde, Fèlix Larrosa, en su ponencia “Lleida, nuevo motor de la economía catalana”, que tuvo lugar durante la sesión de Encuentros La Vanguardia celebrada la semana pasada en el Cercle d’Economia de Barcelona con el patrocinio de Mercolleida, Parc Agrotechlleida Fira Lleida, Consell Econòmic i Social, Llotja de Lleida, Lleida Turisme y el Ajuntament de Lleida.
El liderazgo emergente de Ponent proviene de su ecosistema agroalimentario, su capacidad logística y su disponibilidad de suelo industrial, agua y energías renovables
Lleida ha dejado de ser una ciudad con potencial a ser una ciudad con liderazgo”, afirmó su alcalde, Fèlix Larrosa, en su ponencia “Lleida, nuevo motor de la economía catalana”, que tuvo lugar durante la sesión de Encuentros La Vanguardia celebrada la semana pasada en el Cercle d’Economia de Barcelona con el patrocinio de Mercolleida, Parc Agrotechlleida Fira Lleida, Consell Econòmic i Social, Llotja de Lleida, Lleida Turisme y el Ajuntament de Lleida.
La consellera d’Economia i Finances de la Generalitat de Catalunya, Alícia Romero, dio paso a la ponencia de Larrosa subrayando que “Lleida tiene muchas fortalezas para explicar” y que hacerlo en Barcelona, ante un centenar de representantes del mundo económico, político y social, entre ellos el conseller de la Presidència de la Generalitat de Catalunya, Albert Dalmau, junto a representantes de organizaciones empresariales y colegios profesionales y miembros del cuerpo consular, además diferentes partidos políticos con representación en el consistorio de Lleida, es “toda una declaración de intenciones”.
Miquel Gomila
En su intervención previa a la ponencia del alcalde de Lleida, Fèlix Larrosa, la consellera Alícia Romero resaltó la “visión moderna” del paer en cap, “muy comprometido con el talento” y que “lidera una idea potente del país desde Ponent” con una “mirada a medio y largo plazo” para “dar respuesta a las futuras generaciones”. En su opinión, Larrosa tiene un “proyecto de ciudad que quiere ser bueno para sus ciudadanos y generar prosperidad compartida”.
La “fórmula de Lleida” pasa por “reforzar el sector agroalimentario” y “potenciar sus fortalezas”, entre las que su alcalde destacó el “suelo disponible, el agua garantizada, la capacidad de generar energía, el talento en las empresas, universidades, centros de investigación y formación profesional. “Además, tenemos ganas, ilusión e interés”, agregó el alcalde de Lleida. Larrosa recordó una conferencia pronunciada por Vicens Vives en el Cercle d’Economia hace 70 años, en la que se apuntaba ya que Lleida tiene la “responsabilidad histórica de ser fuente de riqueza para toda Catalunya”. Actualmente, “Lleida ha dejado de ser una ciudad con potencial para ser una ciudad con liderazgo”, con un crecimiento del PIB del 40% en una década, además de ser la población donde mejor “funciona el ascensor social”, celebró. Lleida es además la ciudad catalana con más suelo industrial disponible y planificado, hasta 6 millones de metros cuadrados para proyectos vinculados al sector agroalimentario, la logística y la economia circular, entre otros.
Miquel Gomila
En la industria agroalimentaria, que representa casi el 20 por ciento del PIB catalán, según Larrosa, “toca dar el salto de ser la capital productiva a ser la capital del valor añadido”. Para ello, dispone de un “sector primario fuerte y diversificado” con un “liderazgo reconocido” en sectores como el porcino, la fruta dulce y los cereals. A pesar de ello, el alcalde de Lleida reconoció que existe una necesidad de “mayor alineación público-privada. Para lograrlo, desde la Paeria se impulsan proyectos como el Parc Agrobiotech, con una incubadora de alta tecnologia; el nuevo recinto ferial de 116000 metros cuadrados, que permitirá especializar Fira de Lleida en eventos del sector agroindustrial, como el que se celebrará en otoño, además de caminar conjuntamente con Fira de Barcelona; el refuerzo de Mercolleida, donde se fija el precio de la carne de cerdo mundial. Todo ello, para impulsar su papel de “hub” con “gobernanza compartida y un propósito global” que “posicione Lleida como referente europeo de la industria agroalimentaria”.
Barcelona es una aliada para construir una economía catalana más equilibrada
“Lleida ha de ser conocida no solo por lo que produce, si no por cómo lo produce”, subrayó además su alcalde, que “apuesta por la sostenibilidad como ventaja competitiva”. En paralelo, reclamó “conectar las principales infraestructuras” con el objetivo de que “el corredor mediterráneo y el corredor central se encuentren en Lleida”, mejorando la comunicación de Lleida con Francia, ya que “la conexión con Toulouse es clave” para Lleida como “espacio de referencia del sector de la logística”.
Tras el 22@ barcelonès, Lleida cuenta con la segunda mayor concentración de empreses tecnológicas de Catalunya. La ciudad tiene entre sus principales “preocupaciones”, la “atracción y retención del talento”, que pasa por impulsar el conocimiento a través de la Universidad de Lleida y la formación professional además de un “mercado de la vivienda que no suponga un obstáculo para el crecimiento y el talento”. Lleida es ya un polo de emprendimiento
Lleida apuesta por la sostenibilidad como valor añadido para su competitividad
En el Cercle d’Economia, Fèlix Larrosa finalizó su ponencia insistiendo en que Barcelona es una “aliada estratégica” para “competir a escala europea” y “construir una economía catalana más equilibrada y más diversa” con “valores” y capacidad para “conectar las oportunidades globales”. El paer en cap anunció la puesta en marcha de la oficina Invest in Lleida, que se formalizará con la Generalitat de Catalunya y la Cambra de Comerç de Lleida, y la aprobación de una nueva ordenanza de impulso a la actividad económica con el objetivo de impulsar los proyectos de mayor valor añadido a través de una “administración fácil, que no ponga obstáculos sino que genere confianza y sea ágil, eficiente y transparente”.
Tras la ponencia del alcalde, se celebró la mesa redonda “Lleida capital emergente: competitividad y oportunidades económicas”, que contó con la participación de la presidenta de Alier, Elisabet Alier; el presidente de Vallformosa, Josep Graells; el presidente de Aena, Maurici Lucena; y el presidente de la Cambra de Comerç de Barcelona, Josep Santacreu, moderados por la redactora jefe de economía de La Vanguardia, Elisenda Vallejo.
La formación es un factor clave para potenciar el talento y el emprendimiento
Elisabet Alier señaló que Lleida es un “territorio muy hospitalario para atraer inversiones, con instituciones que ofrecen facilidades”. En su opinión, atraer empresas concienciadas con la “sostenibilidad” y la “economía circular” puede constituir una “herramienta de competitividad y atracción de talento” junto al “apoyo al emprendimiento” y el “refuerzo del tejido empresarial leridano”, a través de la “colaboración universidad-empresa” y la “formación profesional”.
“La formación genera oportunidades”, coincidió el presidente de Vallformosa, Josep Graells, que se muestra convencido de la importancia de que “el talento no tenga que emigrar para prosperar” y que “los que se hayan marchado de Lleida, puedan volver para aportar”. El “ecosistema agroalimentario”, según Graells, debe “liderar la visión mediterránea de la agroagricultura” y “trabajar conjuntamente con las comarcas de Aragón”.
El sector agroalimentario de Lleida representa casi el 20% del PIB catalán
El presidente de Aena, Maurici Lucena, recordó que Lleida tiene “dos aeropuertos muy cerca”, y está una hora y media tanto del aeropuerto de Barcelona como del de Zaragoza, “igual que se tarda en llegar al centro de Londres desde el aeropuerto de Heathrow o del centro de París al Charles de Gaulle”. A su parecer, con casos de éxito como el de BonÀrea, “Lleida es un ejemplo de capacidad empresarial”.
El presidente de la Cambra de Comerç de Barcelona, Josep Santacreu, que precisamente es de Guissona, constató que es necesario contar con un “mayor equilibrio territorial” y “ciudades con dinamismo propio”. Santacreu considera que hay que crear “una alianza territorial para competir en el mundo porque tenemos que ir todos juntos, desde el mundo de la empresa, el sector público y la sociedad civil con ámbitos como el de la universidad. Trabajemos juntos para que las cosas pasen”, concluyó.
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