Líderes árabes plantean la creación de una fuerza de seguridad transnacional similar a la OTAN Leer Líderes árabes plantean la creación de una fuerza de seguridad transnacional similar a la OTAN Leer
Qatar cerró filas este lunes con una cumbre de emergencia con más de 50 países para debatir una respuesta común al bombardeo israelí en Doha de la semana pasada. La agresión, -que Qatar calificó de «flagrante, traicionera y cobarde»-, tenía como objetivo el equipo negociador de Hamas que se encontraba en ese momento en la capital del país árabe para abordar una propuesta de alto el fuego en Gaza. Sin embargo, el bombardeo no abatió a los líderes del grupo palestino, aunque causó la muerte de cinco miembros de Hamas, junto a un oficial de seguridad catarí, provocando un grave conflicto diplomático con Doha.
El ataque a un país mediador en el conflicto causó una gran preocupación regional por la extensión de un conflicto que está a punto de cumplir dos años y en el que países vecinos como Siria, Líbano, Yemen o Irán también han sido objetivo del fuego israelí.
En el encuentro con líderes de países miembros de la Organización para la Cooperación Islámica (OCI), así como de la Liga Árabe; el emir de Qatar, Tamim bin Hamad Al Thani, acusó a Israel de intentar descarrilar las negociaciones para una tregua en Gaza con el ataque a su territorio. «Quienquiera que trabaje de forma persistente y metódica para asesinar a la parte con la que negocia pretende descarrilar las negociaciones», aseguró. El líder qatarí advirtió que el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, «sueña con que la región árabe se convierta en una esfera de influencia israelí» ante los ataques de las últimas semanas contra varios países de la región -Qatar, Yemen, Líbano, Siria- que calificó de «ilusión peligrosa». Al Thani ya lanzó una acusación similar hace casi un año, cuando Israel mató en un bombardeo en Teherán al entonces líder político de Hamas, Ismail Haniyeh. «¿Cómo puede tener éxito la mediación cuando una de las partes asesina al negociador de la otra?», señaló.
A la cita en Doha acudieron líderes de países que también han sido atacados por Israel desde octubre de 2023, como el presidente iraní, Masoud Pezeshkian; el presidente interino sirio, Ahmed Sharaa; o el presidente de Cisjordania, Mahmut Abás. También participaron el presidente egipcio, Abdel Fatah al Sisi; y el primer ministro iraquí, Mohamed Sia al Sudani. «(Israel) ha cruzado todas las líneas rojas», aseguró el presidente egipcio Sisi. «La arrogancia de Israel exige una visión compartida de seguridad y cooperación regional», señaló.
Poco antes del encuentro, fuentes egipcias señalaron al medio emiratí The National que El Cairo está llevando a cabo reuniones para crear una fuerza transnacional, similar a la OTAN, para mejorar la seguridad de los países árabes de la región. Sin embargo, el líder egipcio no se pronunció en público al respecto. En cambio, el primer ministro iraquí, al Sudani, sí puso la cuestión sobre la mesa, proponiendo una «respuesta de seguridad colectiva» similar a la Alianza Atlántica, para responder de forma conjunta a los ataques contra los países miembros.
«La seguridad y la estabilidad de cualquier país árabe o islámico son parte integral de nuestra seguridad colectiva», declaró. «Debemos hacer frente a estas amenazas, reiterando que no se puede tolerar más crímenes. No permaneceremos en silencio ante lo que sucede en Gaza, ni lo que ha ocurrido en Beirut o Yemen», señaló el presidente iraní, Pezeshkian.
Si bien no anunciaron medidas concretas, Qatar reiteró la necesidad de que «la comunidad internacional abandone la doble moral y exija a Israel cuentas por todos los crímenes que ha cometido». Doha aseguró que está «reevaluando todo» en torno a su participación en futuras conversaciones de alto el fuego, así como en su relación con Israel, declaró el primer ministro, Mohamed Al Thani, en una entrevista con la CNN. «Hay una respuesta que se dará desde la región. Esta respuesta se está consultando y debatiendo actualmente con otros socios de la región», añadió. Se espera que el martes, Al Thani reciba al secretario de Estado estadounidense, Marcos Rubio, que viaja a Qatar tras su visita a Israel, donde se reunió con Netanyahu. Estados Unidos intenta sortear el bache diplomático con Qatar, después del ataque israelí contra su territorio.
Minutos después del bombardeo del pasado martes, Washington aseguró que había avisado a Doha del inminente ataque, algo que las autoridades qataríes niegan. Desde entonces, la administración estadounidense ha intentado alejarse del asunto, reiterando que se trata de una operación de la inteligencia israelí en la que no participó.
Desde octubre de 2023, Doha ha ejercido un gran papel mediador entre Hamas e Israel para la liberación de rehenes israelíes, así como negociar un alto el fuego. Las autoridades israelíes han lanzado mensajes contradictorios sobre Qatar a lo largo de la guerra, por un lado confiando en el papel mediador del país árabe, pero cuestionando a su vez su capacidad para presionar a Hamas. Por su parte, Doha suspendió en 2024 su papel mediador ante las presiones, pero lo retomó poco después. Ahora tras el ataque contra su soberanía, las autoridades estudian qué posición tomar al respecto.
La regionalización de la guerra de Gaza y el apoyo de las sociedades árabes a la causa palestina, ha puesto a los gobiernos árabes entre la espada y la pared, debido a los acuerdos de normalización y seguridad que han pactado en los últimos años con Israel y Estados Unidos. Desde octubre de 2023, tanto la OCI como la Liga Árabe han convocado casi una decena de cumbres para abordar la guerra en Gaza, sin medidas diplomáticas concretas para frenar la guerra. Sin embargo, los analistas apuntan que el ataque a Qatar supone un antes y un después en las relaciones diplomáticas de los países de la región con Israel, que podrían replantearse los acuerdos de seguridad pactados en los últimos años. Por el momento, ningún gobierno árabe ha roto relaciones con Israel desde que se desató la guerra en Gaza, pero cada vez más líderes se pronuncian para detener las acciones israelíes. «Nuestro pueblo se ha vuelto cauteloso con las palabras. Nos han visto emitir una condena tras otra, una declaración tras otra, mientras Israel escala impunemente la situación», declaró en la cumbre el primer ministro de Malasia, Anwar Ibrahim. «No pedimos a las naciones que vayan más allá de sus obligaciones básicas, pero las condenas no detendrán los misiles», advirtió.
Internacional // elmundo