Más de cinco millones de usuarios, y un crecimiento del 73,5% con respecto al año anterior, son las cifras del AVE Madrid-València en el último año ‘normal’. El pasado año, con la suspensión de la conexión ferroviaria a causa de la dana, el tráfico experimentó una caída interanual del 12%, hasta los 1,16 millones, pero su volumen de viajeros da una idea de la importancia de este corredor para la Comunidad Valenciana. Este jueves, tras el incidente en la estación de Madrid Chamartín-Clara Campoamor, fueron 9.000 los usuarios de esta conexión afectada. Adif reestableció el viernes a primera hora la circulación tras el incidente, pero voces como la de la patronal valenciana lamentan que el incidente perjudicara personal, profesional y económicamente a “muchos profesionales, empresarios y autónomos”.
La CEV apunta a la “fragilidad” de la infraestructura, que sin el efecto de la dana registraba unos 5 millones de viajeros anuales
Más de cinco millones de usuarios, y un crecimiento del 73,5% con respecto al año anterior, son las cifras del AVE Madrid-València en el último año ‘normal’. El pasado año, con la suspensión de la conexión ferroviaria a causa de la dana, el tráfico experimentó una caída interanual del 12%, hasta los 1,16 millones, pero su volumen de viajeros da una idea de la importancia de este corredor para la Comunidad Valenciana. Este jueves, tras el incidente en la estación de Madrid Chamartín-Clara Campoamor, fueron 9.000 los usuarios de esta conexión afectada. Adif reestableció el viernes a primera hora la circulación tras el incidente, pero voces como la de la patronal valenciana lamentan que el incidente perjudicara personal, profesional y económicamente a “muchos profesionales, empresarios y autónomos”.
Es la queja principal de la Confederació Empresarial de la Comunitat Valenciana (CEV), que ayer emitió un comunicado para mostrar su “preocupación” por las que considera “continuas incidencias” que están afectando a este servicio de alta velocidad. Dicen que el episodio de este jueves, cuando la circulación ferroviaria de alta velocidad quedó suspendida en la estación madrileña de Chamartín al quedar sin tensión las instalaciones a causa del descarrilamiento de la cabeza motriz de un tren que realizaba su entrada en la estación, evidencia la “fragilidad” de una infraestructura que “debería garantizar puntualidad, fiabilidad y seguridad”.
Lee tambiénAGENCIAS
En su comunicado, la CEV pide a ADIF y al Ministerio de Transportes una “revisión urgente” de la infraestructura y del plan de mantenimiento de la línea; protocolos de respuesta rápida ante emergencias y una mejor coordinación entre operadoras; información clara, puntual y accesible para los usuarios e inversiones que “refuercen una conexión estratégica para la Comunitat Valenciana”.
El Partido Popular, por su parte, también criticó ayer al Gobierno tras la incidencia en la estación de Chamartín-Clara Campoamor. Le acusó de “falta de mantenimiento” y de “desorganización”, al tiempo que dijo que su gestión está “hundiendo un servicio que antes era ejemplar”. Lo declaró así el portavoz de Infraestructuras y Transportes del grupo popular en las Corts Valencianes, Joserra González de Zárate, que acusó al Ejecutivo de haber abandonado las infraestructuras ferroviarias y de tratar a los usuarios con una “indiferencia inaceptable”.
El PPCV acusa al Gobierno de “abandonar” las infraestructuras ferroviarias
Lee tambiénNEUS NAVARRO
Fuentes del Ministerio de Transportes aseguran que la infraestructura está perfectamente y que el suceso de ayer fue solo un suceso puntual. Recuerdan que la estación sigue remodelándose (los accesos a Chamartín para la alta velocidad son por el vestíbulo principal y los de Cercanías y Media y Larga Distancia por el vestíbulo central), y de hecho este fin de semana se avanzará en este aspecto.
Sin embargo, fuentes de la patronal insisten en que hay “retrasos e incidencias menores” que se suman al incidente del pasado jueves. Hay que sumar a esa percepción el efecto del apagón en los trenes, que paralizó las estaciones y afectó a cientos de pasajeros; y todo tras una devastadora dana que cortó la conexión entre València y Madrid desde el 29 de octubre y hasta el pasado 14 de noviembre.
El apagón… y sus efectos
El análisis de los datos tras el apagón del 28 de abril que ha hecho CaixaBank revela que este provocó una caída del 34% en el gasto de consumo de los hogares españoles ese día, como resultado de la contracción del consumo mediante los principales métodos de pago: presencial con tarjeta, reintegros y electrónico. En concreto, en la Comunidad Valenciana el consumo cayó ese día un 50%.
Economía
