El expresidente encargado de Venezuela ostenta el récord de escapadas del chavismo y de reingresos a Caracas Leer El expresidente encargado de Venezuela ostenta el récord de escapadas del chavismo y de reingresos a Caracas Leer
Juan Guaidó, ex presidente encargado de Venezuela y gran protagonista del primer desafío de la administración Donald Trump contra Nicolás Maduro, ostenta el récord de escapadas del chavismo (tres) y de reingresos (dos) a Caracas. «Y me falta la última, las más importante. Veo una ventana enorme para recuperar la libertad y la democracia. Pero a la vez una caracterización más clara de lo que es la dictadura. Iría inmediatamente para Caracas», pormenorizó en diálogo con EL MUNDO.
Desde su exilio en Florida, Guaidó describe los momentos de peligro vividos entre 2019 y 2023. Y contradice al presidente colombiano Gustavo Petro, quien ha afirmado que hubiera protegido a María Corina Machado en el caso de que hubiera escapado por la frontera. Bryan Stern, el veterano de guerra estadounidense que comandó la extracción, ha asegurado que se descartó la ruta de salida por Colombia porque Petro no les habría recibido con los brazos abiertos.
- Los sucesos de esta semana han recordado sus distintas fugas, durante las cuales también logró burlar al chavismo con planes muy arriesgados. ¿Qué destacaría de lo que se conoce hasta ahora?
- Sobre todo, la valentía y el coraje de María Corina. Fueron horas de angustia imaginar su salida y recordar las propias. Sé lo que significa pasar las alcabalas (controles policiales y militares), sé lo que significa ese momento de estar resguardado, camuflado. Y para la gente que te acompaña, que se juega la vida en cada paso. Nosotros no hemos dado más información de cada salida por un tema de resguardo: hemos sacado a centenares de personas por rutas parecidas para huir de la persecución, hay que resguardar esas logísticas.
- Gustavo Petro dice ahora que jamás su gobierno ha molestado a los venezolanos que huyen.
- En un momento dado era una opción salir por Colombia (así lo llevó a cabo las tres veces), pero con Petro cuidándole la espalda a Maduro se siente también el peligro. La tercera vez que salgo (2022), la que se convirtió en el exilio, fue muy hostil, porque Petro me expulsó de Colombia, con amenazas de su canciller y de su gente.
- Como ya sucediera en 2019, se ha reabierto el debate en torno a cómo se puede salir de una dictadura en la América Latina de hoy.
- El tema no es cómo preferimos salir, como si el chavismo hubiese respetado el estado de Derecho o las elecciones del año pasado. O que no hubiera presos políticos. Cuando leo hoy a detractores (del liderazgo democrático de la oposición) hablando de diálogo y negociación como si no hubiera antecedentes. ¡Como si no lo hubiésemos intentado! O como si tuviéramos una forma predilecta de salir de la dictadura. Antes era el tema izquierda-derecha para encasillarnos, y ahora el tema es Trump o no Trump. Ese no es el dilema en Venezuela.
- Investigaciones policiales en España han sacado a la luz los entresijos de su gira del 2020 en España, días antes del famoso viaje de Delcy Rodríguez y sus maletas.
- El único presidente europeo que no me recibió fue Pedro Sánchez. Me reuní con Emmanuel Macron, con Boris Johnson, con Angela Merkel, con el presidente de Grecia, con los dirigentes que estaban en Davos. Y sólo faltó Sánchez. Todos nos preguntamos por qué. La respuesta es obvia: la colaboración de Sánchez con la dictadura de Maduro a través de sus diferentes alfiles designados.
- Los tentáculos de la dictadura siguen trabajando a destajo ahora para vender los mantras de guerras civiles, invasiones o huida masiva de Venezuela en caso de que cayera Maduro.
- Ahora las cosas se ven más claras, todo esto es parte de lo que ha enfrentado la resistencia venezolana: el lobby insistente de la dictadura, los petrodólares. Hemos visto cómo normalizaban o banalizaban a la dictadura en detrimento de la democracia. En EEUU pasa, lo hemos visto con las declaraciones de Juan González, el consejero para América Latina de Joe Biden. Recuerdo cuando él estuvo en Venezuela y abogaba por el levantamiento de sanciones, cómo liberaron a los narcosobrinos de Maduro (ahora sancionados de nuevo), como devolvieron a Alex Saab (magnate colombiano que ejerce como ministro y testaferro de Maduro). Todo ese ecosistema queda más expuesto hoy.
- Para la historia de la lucha contra el chavismo quedan sus dos regresos por el aeropuerto de Maiquetía.
- La segunda vez volví por Lisboa y el manifiesto de vuelo decía mi segundo nombre y mi segundo apellido. Hasta el último momento tuvimos la colaboración del Gobierno de Portugal. A mi tío le metieron preso llegando a Caracas. No me quería dejar solo. Le secuestran en el aeropuerto acusándole de llevar bombas, ¡en un avión de TAP! La presión contra tu familia y tu gente es constante, incluso la fuga de mi mujer y mis hijas fue muy peligrosa. La dictadura no respeta nada. Incluso responde con sus aliados, como la respuesta del Gobierno iraní contra la Premio Nobel de la Paz, Narges Mohammadi.
- ¿Es posible el regreso de Machado sin que se haya producido la liberación de Venezuela?
- Arriesgado y difícil es, pero ella ha dicho que va a regresar. Puede ser un momento estelar para la lucha venezolana. Pero no podemos descargar todo sobre María Corina, yo sé lo que es eso. Las expectativas de todo un país no pueden estar sólo sobre los hombros de una persona. Su regreso debe ser un regreso para la transición, con apoyo de la comunidad internacional para que sea seguro. Uno de los motivos por los cuales yo pude regresar en 2019 y 2020 fue precisamente por el respaldo de la comunidad internacional, marcaron muy claramente las líneas a Maduro.
- Pese a la ausencia de Sánchez, el embajador español de entonces (Jesús Silva, recientemente fallecido por un infarto) acudió a protegerle al aeropuerto.
- Que en paz descanse Jesús, un campeón de la democracia. Silva innovó con las relaciones diplomáticas, la diplomacia de la democracia. Se mantuvo fiel a sus principios diplomáticos, era muy audaz, arriesgado. Recuerdo los asedios contra la embajada española. Pero siempre apegado a los valores españoles, muy distantes a los de Pedro Sánchez, por eso terminó saliendo de la embajada. Normalizar dictaduras debe ser parte del pasado. Silva no sólo fue un gran diplomático de carrera, también fue firme con los valores españoles de democracia.
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