El MNAC desmiente la existencia de humedad en la sala de las pinturas de Sijena: “Es mentira”

Nuevo capítulo en la batalla judicial por las pinturas murales del monasterio de Sijena. A la espera de que la jueza Rocío Pilar Vargas se pronuncie una vez haya revisado la batería de documentos presentada por el MNAC para demostrar la “incapacidad técnica” de trasladas las obras sin dañarlas fatalmente, Aragón ha contraatacado ante el juzgado denunciando humedades en las pinturas, lo que a su juicio es una muestra de la “desatención evidente” de los murales y  “aumenta la urgencia de su traslado”.  “Es una mentira absoluta. En la sala 16 [donde se exponen las obras] no hay humedad. Otra cosa es que haya manchas de humedad, pero son manchas antiguas y perfectamente documentadas”, desmienten fuentes del museo catalán, que no han recibido ninguna notificación al respecto por parte del juzgado.

Seguir leyendo…

 El museo defiende de que se trata de manchas antiguas que están perfectamente documentadas y estudiadas  

Nuevo capítulo en la batalla judicial por las pinturas murales del monasterio de Sijena. A la espera de que la jueza Rocío Pilar Vargas se pronuncie una vez haya revisado la batería de documentos presentada por el MNAC para demostrar la “incapacidad técnica” de trasladas las obras sin dañarlas fatalmente, Aragón ha contraatacado ante el juzgado denunciando humedades en las pinturas, lo que a su juicio es una muestra de la “desatención evidente” de los murales y  “aumenta la urgencia de su traslado”.  “Es una mentira absoluta. En la sala 16 [donde se exponen las obras] no hay humedad. Otra cosa es que haya manchas de humedad, pero son manchas antiguas y perfectamente documentadas”, desmienten fuentes del museo catalán, que no han recibido ninguna notificación al respecto por parte del juzgado.

Imagen de las supuestas humedades en las pinturas de Sijena expuestas en el MNAC que denuncia el Gobierno de Aragón
Imagen facilitada por el Gobiernos aragonés sobre las humedades en el soporte de las pinturas  
Gobierno de Aragón

“Las manchas en los soportes de madera de las pinturas son antiguas, conocidas por los expertos y perfectamente documentadas”, insisten desde el MNAC, que tienen informes que demuestran que hay cero humedad en la maderas y que las manchas corresponden al pasado. “Desde que están en la sala 16 no han sufrido ningún tipo de humedad, entre otras cosas porque es imposible, encima están las salas de arte  moderno, y hay más salas abajo y a los lados, con lo que no hay posibilidad de que penetre agua desde el exterior”. A juicio de los técnicos del museo, las humedades, como las grietas o los levantamientos de pintura  son fruto “de la aventura épica que han vivido las pinturas, que sufrieron un incendio, fueron salvadas en  una situación extrema, en plena guerra, para su restauración se aplicaron materiales orgánicos sobre inorgánicos y ambos reaccionan de forma diferentes, las telas sobre las que están pegadas son frágiles, las maderas antiguas… Es lo que hemos dicho y repetido mil veces durante todo el proceso mediante informes advirtiendo de la necesidad de que se mantengan estables y del riesgo del traslado”, concluyen, y remarcan que los expertos del Iccrom que las estudiaron semanas atrás no detectaron ninguna humedad.

A juicio de los técnicos del museo, las humedades, como las grietas o los levantamientos son fruto “de la aventura épica que han vivido las pinturas”

“Las humedades son una mala noticia porque denotan malos trabajos de conservación”, ha denunciado por su parte el director general de Cultura aragonés, Pedro Olloqui, al informar de que su Gobierno ha pedido al juzgado número 2 de Huesca, encargado de ejecutar la sentencia sobre las pinturas de Sijena, que ordene su traslado desde el Museu Nacional d’Art de Catalunya (MNAC) al monasterio oscense “con la mayor celeridad posible” tras detectar manchas de humedad que acreditan su “mal” estado de conservación en el museo barcelonés.

Los servicios jurídicos del Ejecutivo aragonés han trasladado un escrito al juzgado con documentación gráfica “de crucial relevancia” para la ejecución de la sentencia, ya que evidencian la existencia de manchas de humedad, según ha avanzado hoy el diario Heraldo de Aragón.

Lee también

Son fotografías que fueron tomadas por los técnicos aragoneses a finales de julio tras acceder al museo para iniciar la supervisión técnica de las pinturas allí expuestas. En concreto, las imágenes han detectado las humedades en la parte trasera de las pinturas localizadas “en una esquina de una arcada de una de las partes principales”, tal y como explicó Olloqui, que relató que para su toma se emplearon diferentes procedimientos técnicos, como pértigas y cámaras de 360 grados. 

“El impacto del viaje será en el peor de los casos mucho menor que la humedad recibida”, opina el director de Cultura aragonés

De acuerdo con el escrito presentado al juzgado, esas fotografías revelan que la conservación de los bienes por parte del MNAC “no ha sido la adecuada conforme a los parámetros y exigencias técnicas más elementales”, por lo que considera procedente que las pinturas sean bajadas de su ubicación en la sala 16 y trasladadas “sin dilación” a su ubicación original: la sala capitular del monasterio de Sijena.

En esta línea, argumentan que, si bien el estado de las pinturas es frágil, “es capaz de soportar el traslado”, ya que el impacto del viaje “será en el peor de los casos mucho menor que la humedad recibida mientras las pinturas estaban dentro del museo”.

Lee también

Una postura que también ha defendido Olloqui, para quien las imágenes desmontan el principal argumento del MNAC sobre que las pinturas están mejor en su actual emplazamiento y correrían riesgo de daño “irreversible” con el traslado. “El argumento del MNAC se desmonta”, ha abundado.

Sobre cuándo pudieron aparecer esas humedades, el informe tan solo arguye que aparecieron una vez que los frescos estuvieron ya montados en los bastidores, “lo que implica que esa humedad impactó en las pinturas cuando estaban ya en su ubicación actual o en la sala de reserva”.

Sin embargo, esa falta de concreción en las fechas –los frescos están en la sala desde  1995- no ha evitado que Olloqui critique la “desatención evidente” de estas joyas del románico. “Si estuvieran tan pendientes (como dicen) no habría esas humedades”, ha apuntado el director general, que reiteró “la urgencia del traslado” y que este se ajuste al cronograma de siete meses que presentó el Gobierno aragonés en verano.

Asimismo, Olloqui ha criticado la iniciativa de la Generalitat catalana y el Ayuntamiento de Barcelona para celebrar un simposio internacional con especialistas que busque el consenso y se base en fundamentos científicos, propuesta inspirada en el cónclave que se celebró en 1998 para abordar las dudas existentes sobre el traslado del Gernika al Museo Guggengheim de Bilbao.

“Es aplicar soluciones del siglo pasado a problemas del siglo XXI. No tiene ningún sentido”, menos aún “con el estado de la técnica actual”, ha subrayado.

 Cultura

Te Puede Interesar