Parar en una gasolinera para repostar es un gesto rutinario que miles de conductores repiten cada día. Más allá de si es mejor llenar el depósito por la mañana o repostar a principios de semana para ahorrar unos céntimos, la pregunta de fondo sigue siendo la misma: ¿conviene echar gasolina de 98 octanos si el coche funciona con la de 95?
El profesional de Talleres Gabilondo de Valladolid despeja una de las dudas más comunes entre conductores
Parar en una gasolinera para repostar es un gesto rutinario que miles de conductores repiten cada día. Más allá de si es mejor llenar el depósito por la mañana o repostar a principios de semana para ahorrar unos céntimos, la pregunta de fondo sigue siendo la misma: ¿conviene echar gasolina de 98 octanos si el coche funciona con la de 95?
Carlos Pérez (Valladolid, 1978), elegido mejor mecánico de España en 2025 por La Comunidad del Motor, es muy claro. “La mayoría de coches que consumen gasolina están diseñados para funcionar con 95 octanos, aunque también pueden usar 98. Pero en mi opinión, no merece la pena hacer ese pequeño esfuerzo económico, ya que lo que ganas por un lado lo pierdes por el otro”.

El profesional de Talleres Gabilondo explica que, aunque con la gasolina de 98 se puede lograr una mayor autonomía, esa mejoría no se debe al mayor octanaje, sino a que este tipo de combustible suele contener un mayor porcentaje de aditivos que ayudan a mantener el motor más limpio y en mejores condiciones. “Sin embargo, esos kilómetros extra que puedes lograr con la de 98 se compensan con el precio más elevado que pagas en la gasolinera, por lo que al final no supone un ahorro real para el bolsillo”.
Pérez afirma que más importante que el octanaje es consumir gasolinas de calidad, ya que los aditivos protegen el motor y evitan costosas averías a largo plazo
En cuanto a la idea de alternar depósitos de 95 y 98 para aprovechar lo mejor de ambos combustibles, Pérez no lo considera necesario ni especialmente beneficioso. “No recomiendo alternar, porque no aporta ventajas reales y complica el gasto sin que el motor lo note”.

Además, Pérez puntualiza que el motor solo se beneficia del octanaje más alto cuando está diseñado para ello, generalmente en coches de altas prestaciones o con motores de compresión elevada. En el resto de vehículos, el uso habitual de gasolina de 98 no aporta ventajas significativas. Por eso, insiste en que “lo más importante es seguir siempre las recomendaciones del fabricante y elegir combustibles de calidad, sin dejarse llevar por falsas creencias o marketing”.
La gasolina de 98 octanos permite recorrer más kilómetros, pero también es más cara
En este sentido, el sucesor de Javier Sendín como mejor mecánico de España, sí recomienda a los usuarios utilizar gasolinas de calidad en sus vehículos. “Aunque todas las gasolinas proceden en última instancia de los mismos proveedores mayoristas, las diferencias están en los aditivos que cada compañía incorpora. Estos aditivos son los que ayudan a mantener limpio el sistema de alimentación y a prevenir la acumulación de residuos en el motor, lo que puede afectar al rendimiento y la durabilidad del vehículo”.
Por ello, Pérez aconseja evitar las gasolineras low cost, que aunque resultan más económicas a primera vista, suelen tener un menor nivel de estos aditivos protectores. “El precio puede ser tentador, pero a largo plazo, el uso de combustibles de peor calidad puede provocar averías y un mayor desgaste del motor, con el coste que eso supone en reparaciones”, asegura este reconocido mecánico.
Para él, lo mejor es optar por marcas reconocidas, porque aunque cuesten un poco más, a la larga evitan problemas y ayudan a que el motor dure más tiempo en buen estado, sobre todo en coches con más kilómetros o antigüedad. ”Al final, un buen combustible es una inversión en tranquilidad y mantenimiento”, sentencia Pérez.
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