El grupo madrileño Carolina Durante ha hecho un salto muy cualitativo con su tercer álbum Elige tu propia aventura , que no solo se ha aupado a los mejores puestos en las listas de la cosecha pop del 2024, sino que ha propiciado un aumento exponencial de sus fans. En el inicio de la gira de presentación, han tenido que añadir una fecha extra en su cita barcelonesa: dos noches en el Sant Jordi Club.
El grupo madrileño ha mostrado su evolución con su tercer álbum, ‘Elige tu propia aventura’, y se funde con sus seguidores, que cantan sus canciones con fervor, en el Sant Jordi Club
El grupo madrileño Carolina Durante ha hecho un salto muy cualitativo con su tercer álbum Elige tu propia aventura , que no solo se ha aupado a los mejores puestos en las listas de la cosecha pop del 2024, sino que ha propiciado un aumento exponencial de sus fans. En el inicio de la gira de presentación, han tenido que añadir una fecha extra en su cita barcelonesa: dos noches en el Sant Jordi Club.
Se prepararon bien para el envite; primero con una cuidada escenografía que reproduce algo que parece un loft , una vivienda chic de color amarillo donde se mueven los músicos, cuatro ubicados en el suelo y dos en tarimas. En la más elevada se sitúa Esteban Fraile, alias Banin, que de Los Planetas ha pasado a aportar sus teclados y guitarra como músico de refuerzo para el cuarteto que lidera el carismático cantante Diego Ibáñez, convertido en sexteto con el añadido de otro guitarrista.

Christian Bertrand (Primavera Sound
Ya desde la inicial Joderse la vida quedaron claras dos cosas: lo ingenioso de las letras y la gran conexión que han establecido con sus seguidores que cantaban las canciones como si les fuera la vida en ello. Fuese al ritmo punky y distorsionado de Aaaaaa#$!& , rebelándose a la sumisión –“ que no quiero ser tu perro”–, o a golpe de megáfono con un Misil pop, pegadizo y con una letra que habla de los tiempos en los que tocaban “en la 2 de la Razzmatazz”. Los himnos generacionales se sucedieron con el marcador del “ molómetro” a cien en Famoso en tres calles , con el Banin poniendo tono sintético a Tempo 2 o convirtiendo la gritona y acelerada Niña de hielo en un gran clímax amazacotado.
Lee también
No hubo tregua en la veintena larga de canciones que sonaron como un torrente arrollador, con momentos a tres guitarras en la destroy y breve Tomé café , guiños al power-pop de Los Nikis en Dios plan o incluso bajando el tempo para mostrar vulnerabilidad –“ tengo miedo de no ser quien quieres que sea”– en la melancólica y agridulce San Juan .
En la parte final llegó la hora de demostrar que estos Cuatro chavales han pasado de la inmediatez de Cayetano a crecer y evolucionar. Invitaron a un cuarteto de cuerda y a un trompetista para inflamar Elije tu propia aventura , poner opulencia orquestal a La noche de los muertos vivientes y contribuir a la apoteosis de Probablemente tengas razón . Pero para algarabía la que se desató con la aparición de su colega Barry B para cantar Yo pensaba que me había tocado Dios y luego en un Hamburguesas que tiene el decisivo estribillo de “mis amigos suman más que mis demonios”. Faltaba aún la que han hecho con Rosalía, un Normal que le dedicaron antes de dar las gracias a su hermana Pili, la chica del cantante, y el postrero himno Las canciones de Juanita , motivador de un pogo descomunal convertido en “la banda sonora de nuestras vidas”.
Cultura